1980 /
Granollers / Madre de un niño precioso / Educadora Especial
/ Instructora de porteo formada en la escuela Llévame Cerca.
Cuando estaba
embarazada, tenía muy claro que quería portear. Pero nunca pensé que el porteo
se convertiría en una parte tan importante de nuestra vida. Y tan necesaria!
Arnau nació muy grande y
con muchas ganas de brazos. Como cualquier otro bebé supongo. Lo empecé a
portear con un fular elástico, que se convirtió en nuestra segunda piel durante
el invierno.
Arnau creció tan rápido
que me vi obligada a ponerme las pilas y buscar otra forma de llevarlo encima. Los
fulares tejidos siempre me habían llamado la atención pero me daba miedo no
aprender a usarlos bien, y al final me decidí por un Mei tai, que es una mezcla
de mochila y fular. Nos fue muy bien, pero para usarlo en la espalda, no me
acababa de sentir cómoda. Así es como hace 5 meses dimos el salto y ahora vamos
con fulares tejidos, encantados de la vida. En momentos puntuales, también
usamos bandoleras y un portabebés ligero de rejilla.
Arnau
parece un niño grande. Pesa 13kg y abulta mucho. Pero sigue siendo un bebé, con
mucha necesidad de contacto y muchas ganas de explorar mundo al mismo tiempo.
Mucha gente me pregunta porque lo sigo llevando en brazos… pues porque me gusta
nos gusta. El porteo nos ofrece la intimidad que tanto disfrutamos y a la vez
le brinda unas vistas privilegiadas a Arnau, que no se pierde nada y va tomando
notas. Y QUE DURE!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada